Sal Emergui | Jerusalén
Actualizado lunes 24/01/2011 01:00 horas
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El liderazgo palestino en Ramala se encuentra asombrado, enfadado y sobre todo preguntándose quién es su funcionario o dirigente que ha filtrado los documentos más sensibles de las negociaciones con Israel en la última década. Los que no se lo preguntan denuncian abiertamente que parte de los documentos son "falsos y fabricados". Lo que no pueden evitar es que mucho de lo que se dijo en la intimidad de los despachos y cumbres está saliendo a la luz.
Estamos hablando de los llamados "papeles palestinos", filtradosdesde el domingo por la noche por la cadena de televisión Al-Jazeera y que deja al presidente palestino, Abu Mazen y el equipo negociador en una situación muy embarazosa. Por ejemplo, revela que, lejos de las cámaras y micrófonos, habrían aceptado la soberanía israelí en prácticamente toda Jerusalén Este, excepto la colonia de Har Joma.
Uno de los 1.600 documentos que Al-Jazeera filtra (junto al diario británico 'The Guardian'), recrea una reunión tripartita el 15 de junio del 2008 encabezada por el negociador palestino Abu Ala, la ministra israelí de Exteriores, Tzipi Livni, y su homóloga norteamericana, Condoleeza Rice.
"Nosotros propusimos la anexión de Israel de todos los asentamientos en Jerusalén excepto Jabal Abu Ghneim (Har Joma). Esta es la primera vez en la historia que hacemos este tipo de oferta. En Camp David (2000), rechazamos hacerlo", dijo Abu Ala, ex primer ministro palestino.
'Houston, tenemos un problema'
En otra reunión, Livni, Abu Ala y el actual jefe negociador Saeb Erekat intentaron acercar posturas sobre este punto tan disputado. "Jerusalén es parte de los territorios ocupados en el 67", le dijo Abu Ala a la israelí que no contestó ya que su postura en ese preciso momento era no negociar sobre Jerusalén. "Houston, tenemos un problema", acabó diciéndole Livni.
Erekat intervino con una frase que hoy le pasará factura entre los palestinos y árabes: "No es ningún secreto que el mapa que os ofrecemos es la Yerushalayim (termino en hebreo de la ciudad santa) más grande de la historia. Pero tenemos que hablar también de dónde estará Al Quds (término en árabe). Tenemos ideas pero necesitamos un partner".
Estos documentos contradicen las habituales reivindicaciones palestinas que condicionan cualquier acuerdo de paz a la retirada israelí de Jerusalén Este, ocupada en la guerra del 67. Una zona que los palestinos aspiran sea la capital de su futuro Estado.
Hace un año, Erekat ofreció al mediador norteamericano George Mitchell solucionar la disputa sobre Jerusalén de acuerdo al plan Clinton (ofrecido en la cumbre de Camp David del 2000, rechazado por Yasir Arafat) y según el cual, el casco antiguo de la ciudad estará bajo soberanía palestina excepto el barrio judío y parte del armenio mientras que el control de la Explanada de las Mezquitas y el Muro de las Lamentaciones deberá ser negociado. Olmert dijo a Erekat que este tema debía ser tratado más adelante.
Según la filtración, los negociadores israelíes rechazaron la propuesta palestina porque la anexión no incluía Har Joma y dos grandes asentamientos como Ariel y Maale Adumim. Abu Ala, por ejemplo, comentó a Livni que Maale Adumin, cerca de Jerusalén, no sería desmantelado pero tendría que estar bajo soberania palestina. La israelí lo rechazó: "Al día siguiente, ellos (los palestinos) les matarían".
Sorprendidos por la filtración
Invitado en Al Jazeera, Erekat no ocultó su gran asombro por la filtración acusando a la cadena de ser "poco ética" por no enseñarle con antelación los documentos para así poder responder en directo. "El contenido de todas las negociaciones fue transferido al secretario de la Liga Arabe y algunos países árabes por lo que los palestinos no tenemos nada que ocultar", afirmó muy enfadado.
La cadena de Qatar afirma que los 1600 documentos desnudan el largo e infructuoso proceso de paz entre israelíes y palestinos. Entre otros puntos, se revela una supuesta concesión palestina en el asunto del retorno de los refugiados palestinos y la aceptación de un Estado desmilitarizado.
Un documento cuenta que hace más de un año Erekat sugirió a Estados Unidos un canal secreto de diálogo con el Gobierno israelí. Su opinión personal del primer ministro israelí no tiene desperdicio: "Así es Netanyahu. Nadie puede competir con él. Si no, pregunta al presidente Clinton. Yo estaba en la mansión de Wye Plantation, mira lo que el presidente Simon Peres cuenta sobre las promesas de Netanyahu o lo que Netanyahu dice a los egipcios, 'cuando venga la paz…' pero el se niega a comprometerse por la paz".
También detallan -aunque no es ninguna novedad- la estrecha colaboración entre las fuerzas de seguridad de la ANP e Israel. En este caso, se adelanta incluso que Abu Mazen sabía que el Ejército israelí iba a lanzar una ofensiva militar contra el grupo islamista Hamas en diciembre de 2008. O el importante papel de los servicios secretos británicos para aplastar a Hamas en los territorios palestinos.
En el entorno de Abu Mazen, ven las filtraciones como "una campaña orquestada por un enemigo interno con ganas de derribarle y amplificada por un canal (Al Jazeera) que siempre apoya a Hamas".