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martes, 14 de febrero de 2012

Identifican a la última víctima del 11-S



Karol Ann Keasler, nacida en Hudson, tenía 42 años en el momento de los ataques, cuando trabajaba como planificadora de eventos para el banco de inversión Keefe, Bruyette & Woods, además de ser voluntaria en un asilo de ancianos



De las 2.753 muertes confirmadas en el «World Trade Center», solo 1.633 personas han sido identificadas. Los restos de 1.120 personas no han podido ser recuperados. Gracias a una revolucionaria técnica de identificación con sólo extraer el ADN de un pequeño trozo de hueso, se pudo identificar, se pudo identificar a Keasler



Su familia ya había asumido su muerte, pero la noticia de su identificación fue un motivo de alivio y extrañeza a la vez.



"Casi no nos acordábamos de que la estaban buscando hasta que la policía de Nevada fue a casa de mi madre y le dijeron lo que habían encontrado en Nueva York. Pensábamos que estas cosas solo pasan en 'CSI'", manifestó su hermana, Sussan, a medios locales.



Su madre, Denisse, incinerará los restos de Karol luego de 10 años y 152 días de su fallecimiento.



Según el testimonio de su padre, Karol Ann Keasler fue animadora y le gustaba mucho bailar. Cursó sus estudios en la Universidad de Arizona y más tarde, después de graduarse, se asentó en Nueva York. Antes de morir aquel martes 11 de septiembre, había llegado ese mismo fin de semana de un viaje en Italia. Planeaba con su novio mudarse a Moscú.


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