España/Internacional
espacioseuropeos.com (8/11/2011)
Estamos asistiendo en nuestro país a un crecimiento espectacular del poder de la banca de tal forma que las decisiones políticas se toman para acrecentar los privilegios de una banca usurera. Si la banca manda no hay democracia.
La banca está arruinando a nuestro país. Recibió del gobierno más de 236.000 millones de euros, y han generado una espiral de endeudamiento del país con la emisión a niveles insostenibles de deuda pública, de la que se está lucrando. El negocio de la deuda pública les está generando pingües beneficios, al recibir dinero del Banco Central Europeo a un tipo de interés del 1% y prestarlo de nuevo al Estado a intereses superiores al 4%.
La banca ha arruinado a la pequeña empresa, al cerrar el grifo de los créditos, o empeorar las condiciones de los préstamos. Una de cada cuatro pequeñas empresas que solicitó crédito para atender sus necesidades de liquidez en el año 2010 no pudo obtenerlo. Mientras, no deja de crecer el crédito a los partidos políticos que ven condonadas sus deudas.
La banca ha arruinado a cientos de miles de familias. Cada día son desahuciadas en España 250 familias por no poder pagar la hipoteca. Se les roba su hogar, y se les encadena a una deuda que tendrán que pagar y sufrir toda su vida.
La banca no ha parado hasta conseguir la privatización de las Cajas de Ahorro, quedándose con los ahorros del pueblo. Isidro Fainé, Rodrigo Rato, Carlos Slim se van a forrar con el reparto de este gran pastel. Emilio Botín ha insistido en que hay que rematar la faena y terminar cuanto antes con la reestructuración de las cajas. Van a despedir a más de 30.000 trabajadores, cuyo coste va a suponer más de 700 millones de euros del erario público. Además se va a producir una concentración bancaria muy peligrosa que va a implicar la imposición de unas condiciones leoninas para los más pobres.
La banca está arruinando a pueblos enteros esclavizados con una deuda externa que ya han pagado con creces. Solo en Grecia, los prestamistas cobran en intereses más de un 20%, mientras que sigue la recolonización de los grandes bancos españoles en Iberoamérica. Esto genera más violencia, más paro, y más hambre.
El gobierno de Rodríguez Zapatero comenzó con una visita al despacho deEmilio Botín. Nunca un presidente del gobierno se había atrevido a mostrarse públicamente tan servil con la banca. Y termina sus días de presidente adelantando las elecciones con las reformas que los grandes banqueros y empresarios demandan.
La banca es la gran beneficiaria de esta crisis y el PSOE el gran TRAIDOR.
N. de la R.
Este artículo se publica con la autorización de
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