La Guardia Civil va a incorporar unos nuevos aviones no tripulados para la lucha contra el tráfico drogas y la inmigración ilegal procedente del norte de África. El plan, de 12 millones de euros, llevará al Estrecho UAVs de última generación.
El operativo del que informó ECD tiene un objetivo claro: ‘blindar’ las costas del sur de España ante el tráfico de drogas y de armas, así como prevenir la inmigración ilegal.
En la compra del Camcopter S-100 y el Predator ha tenido un papel importante la Unión Europea, que financia un proyecto para proteger y controlar la entrada al continente por el sur de la Península.
Vea como son y cómo operan estos dos modelos de vehículo aéreo no tripulados:
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