A pesar de que Estados Unidos y Japón han manifestado su intención de no enfrentarse por la cuestión de la reorganización de tropas norteamericanas en la región, Washington siguió presionando este jueves a Japón para que decida antes de fin de año el lugar exacto en el que va a reubicar la base norteamericana.
La adminitración de Estados Unidos comunicó al Gobierno del primer ministro nipón, Yukio Hatoyama, su intención de no presionar por el acuerdo militar, en el marco de la inminente visita del inquilino de la Casa Blanca a Tokio, aunque sí buscará una resolución de la materia para finales de año, en parte por motivos presupuestarios.
DE EP
Tras su victoria en los comicios de agosto, Hatoyama informó de que trasladaría la base de la infantería de marina estadounidenses dentro de la prefectura de Okinawa, en el sur del país.
Aunque Washington se opone a esta propuesta e insta al Gobierno nipón a cumplir el acuerdo suscrito entre ambos países en 2006 donde se acordó que la base de Futenma sería establecida en la localidad de Nago, en Okinawa.
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