Al menos 30 personas han muerto en los últimos dos días y otras 90 han resultado heridas durante los disturbios ocurridos en la ciudad siria de Homs, que se han recrudecido esta madrugada, según el grupo opositor la Revolución Siria contra Bashar Asad. Este grupo, uno de los más activos durante la revuelta, ha denunciado este martes en su página en Facebook la muerte de un joven de 26 años esta madrugada, supuestamente la última víctima de los disturbios que estallaron en esta localidad del centro del país el pasado sábado y en los que este lunes murieron 20 personas. Además, denunció que agentes de seguridad y sus matones han cargado contra los ciudadanos en distintos puntos de Homs, y han destruido propiedades públicas y privadas cerca de la plaza de la Libertad en esta ciudad, situada a 165 kilómetros de Damasco. Según el canal de televisión qatarí Al Yazira, que cita al activista opositor sirio Omar Adlabi, la policía disparó de manera intensa contra los manifestantes, que se concentraban en la plaza 'Al Hurriya' (La Libertad, en árabe). Asimismo, un ciudadano de la localidad identificado como Abu Asam, indicó a Al Yazira que las líneas telefónicas estaban casi cortadas y agregó que los agentes dispararon directamente contra la gente. Por su parte, el Ministerio del Interior sirio calificó en un comunicado los incidentes ocurridos en los últimos días en Homs y en la vecina Banias de una "rebelión armada" llevada a cabo por grupos armados de organizaciones salafíes (musulmanes suníes rigoristas) que quieren establecer emiratos islámicos salafíes, según la agencia oficial de noticias SANA. Según el comunicado, han sido asesinados miembros del Ejército, de la Policía y civiles, por estos grupos radicales que han causado numerosos destrozos. El Ministerio calificó estos actos de "una crimen terrible" cuyo objetivo es extender el caos entre los ciudadanos. Siria es escenario desde el pasado 18 de marzo de protestas de la oposición en todo el país, que exigen reformas políticas en el régimen de Bachar al Asad. El mandatario anmunció que esta semana pondría en marcha una nueva legislación para acabar con 50 años de ley de emergencia, pero su promesa no ha logrado acallar las protestas.

Al menos 30 personas han muerto en los últimos dos días y otras 90 han resultado heridas durante los disturbios ocurridos en la ciudad siria de Homs, que se han recrudecido esta madrugada, según el grupo opositor la Revolución Siria contra Bashar Asad.

Este grupo, uno de los más activos durante la revuelta, ha denunciado este martes en su página en Facebook la muerte de un joven de 26 años esta madrugada, supuestamente la última víctima de los disturbios que estallaron en esta localidad del centro del país el pasado sábado y en los que este lunes murieron 20 personas.

Además, denunció que agentes de seguridad y sus matones han cargado contra los ciudadanos en distintos puntos de Homs, y han destruido propiedades públicas y privadas cerca de la plaza de la Libertad en esta ciudad, situada a 165 kilómetros de Damasco.

Según el canal de televisión qatarí Al Yazira, que cita al activista opositor sirio Omar Adlabi, la policía disparó de manera intensa contra los manifestantes, que se concentraban en la plaza 'Al Hurriya' (La Libertad, en árabe).

Asimismo, un ciudadano de la localidad identificado como Abu Asam, indicó a Al Yazira que las líneas telefónicas estaban casi cortadas y agregó que los agentes dispararon directamente contra la gente.

Por su parte, el Ministerio del Interior sirio calificó en un comunicado los incidentes ocurridos en los últimos días en Homs y en la vecina Banias de una "rebelión armada" llevada a cabo por grupos armados de organizaciones salafíes (musulmanes suníes rigoristas) que quieren establecer emiratos islámicos salafíes, según la agencia oficial de noticias SANA.

Según el comunicado, han sido asesinados miembros del Ejército, de la Policía y civiles, por estos grupos radicales que han causado numerosos destrozos.

El Ministerio calificó estos actos de "una crimen terrible" cuyo objetivo es extender el caos entre los ciudadanos.

Siria es escenario desde el pasado 18 de marzo de protestas de la oposición en todo el país, que exigen reformas políticas en el régimen de Bachar al Asad.

El mandatario anmunció que esta semana pondría en marcha una nueva legislación para acabar con 50 años de ley de emergencia, pero su promesa no ha logrado acallar las protestas.

Al menos 30 personas han muerto en los últimos dos días y otras 90 han resultado heridas durante los disturbios ocurridos en la ciudad siria de Homs, que se han recrudecido esta madrugada, según el grupo opositor la Revolución Siria contra Bashar Asad.

Este grupo, uno de los más activos durante la revuelta, ha denunciado este martes en su página en Facebook la muerte de un joven de 26 años esta madrugada, supuestamente la última víctima de los disturbios que estallaron en esta localidad del centro del país el pasado sábado y en los que este lunes murieron 20 personas.

Además, denunció que agentes de seguridad y sus matones han cargado contra los ciudadanos en distintos puntos de Homs, y han destruido propiedades públicas y privadas cerca de la plaza de la Libertad en esta ciudad, situada a 165 kilómetros de Damasco.

Según el canal de televisión qatarí Al Yazira, que cita al activista opositor sirio Omar Adlabi, la policía disparó de manera intensa contra los manifestantes, que se concentraban en la plaza 'Al Hurriya' (La Libertad, en árabe).

Asimismo, un ciudadano de la localidad identificado como Abu Asam, indicó a Al Yazira que las líneas telefónicas estaban casi cortadas y agregó que los agentes dispararon directamente contra la gente.

Por su parte, el Ministerio del Interior sirio calificó en un comunicado los incidentes ocurridos en los últimos días en Homs y en la vecina Banias de una "rebelión armada" llevada a cabo por grupos armados de organizaciones salafíes (musulmanes suníes rigoristas) que quieren establecer emiratos islámicos salafíes, según la agencia oficial de noticias SANA.

Según el comunicado, han sido asesinados miembros del Ejército, de la Policía y civiles, por estos grupos radicales que han causado numerosos destrozos.

El Ministerio calificó estos actos de "una crimen terrible" cuyo objetivo es extender el caos entre los ciudadanos.

Siria es escenario desde el pasado 18 de marzo de protestas de la oposición en todo el país, que exigen reformas políticas en el régimen de Bachar al Asad.

El mandatario anmunció que esta semana pondría en marcha una nueva legislación para acabar con 50 años de ley de emergencia, pero su promesa no ha logrado acallar las protestas.