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sábado, 11 de febrero de 2012

Los ‘supermisiles’ SM3 llegarán a la base de Rota en 2013 como pieza clave del escudo diseñado por Estados Unidos. Éste es el calendario del despliegue hasta 2020



El Escudo Antimisiles de la base naval de Rota, operativo en el que España cooperará junto a Estados Unidos, tendrá plena operatividad en el año 2018. El plan de Estados Unidos incluye introducir pruebas y mejoras al sistema hasta ese año.



La OTAN tiene previsto dar a conocer el calendario oficial del despliegue del escudo antimisiles europeo el próximo mes de mayo, durante la cumbre de ministros de Defensa que se celebrará enChicago (EE.UU.).

En ese encuentro, la Alianza Atlántica declarará la “capacidad operativa inicial” del sistema. Sin embargo, el anuncio se circunscribirá únicamente a la parte del sistema que estará instalada enRumanía, Polonia y Turquía –el componente terrestre del escudo-.

Sin embargo, la puesta a punto componente marítimo del escudo antimisiles, que estará situado en la base naval de Rota, tendrá que esperar algo más. Fuentes militares han informado a El Confidencial Digital de cuáles son las fechas e hitos que deberá ir cumpliendo la Alianza hasta llegar a 2020, cuando todo el sistema sea plenamente operativo.



2012-2013: Fase de despliegue

Actualmente, la instalación en Rota se encuentra en esta primera fase de despliegue. Los sistemas informáticos y el material técnico necesario –centros de control, mantenimiento…- ya están llegando a Rota a bordo de aviones de transporte militar norteamericano, tal y como informó la pasada semana ECD.

A finales de 2012 y principios de 2013 comenzarán a desplegarse parte de los 1.100 militares y civiles que conforman el equipo humano que estará al frente del componente marítimo del sistema antimisiles de Rota.

También se iniciará el despliegue de los primeros destructores norteamericanos, y la llegada a la base gaditana de los poderosos misiles RIM-161 SM-3 Bloque 1ª –los más ‘rudimentarios’ y de menor alcance que el de sus ‘hermanos mayores’-. Igualmente, se instalarán sistemas de radar terrestres tipo AN/TPY-2, principalmente en Rumanía y Polonia.

La Armada española, tal y como contó ECD, deberá decidir si quiere actualizar los sistemas electrónicos de sus fragatas F-100 para poder tener a su disposición alguna unidad de este moderno SM-3 –sólo los tienen Estados Unidos y Japón-.

2014-2015: Fase de pruebas



Según las fuentes militares consultadas por ECD, los dos años posteriores a la instalación del sistema antimisiles en Rota estarán orientados a probar los equipos y “fijar la doctrina” de funcionamiento.

Entre 2014 y 2015, todo el conjunto del sistema deberá ser testado para, en 2015, comenzar el despliegue de la ‘evolución’ del SM-3: el denominado Bloque 1B, con una tecnología que permite procesar mejor las amenazas aéreas e identificarlas –evitando ser ‘engañado’ por señuelos-.

2015-2018: Llegar hasta los 5.500 kilómetros



A partir de 2015, el reto de la Alianza Atlántica será el de dotarse de capacidades para la eliminación de misiles que supongan una amenaza y que estén situados en un rango de entre 3.000 y 5.500 kilómetros –alcance intermedio-.

Hasta entonces, el sistema sólo permitirá el derribo de misiles desde los 1.000 hasta los 3.000 kilómetros –corto y medio alcance-.

En esos años, Rota recibirá una nueva evolución de los SM-3, correspondiente al Bloque 2A –demayor alcance y más devastadores-.

2018-2020: Protección total contra misiles Intercontinentales



Durante esta última fase, Rota no experimentará muchos cambios: en 2018 deberán quedar sentadas las bases definitivas del componente marítimo del escudo.

Sin embargo, la fase se completará con la llegada de la última evolución de los SM-3, el Bloque 2B, con el que el operativo se dotará de capacidad Intercontinental: el escudo antimisiles será capaz de derribar una amenaza que se encuentre en la exoesfera, a distancias superiores a 5.500 kilómetros.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Hola

Cuando se habla de alcances/rangos de misiles balísticos en relacion a un interceptor que debe de intentar derribarlos hay que tener encuenta que no se refiere directamente al alcance sino al apogeo de la trayectoria de éste.

Por ejemplo, un interceptor SM-3 no tiene opción a interceptar un ICBM porque su apogeo(punto más elevado) está muy por encima del techo máximo de interceptación del SM-3. Aparte, practicamente toda la trayectoria de un ICBM está más allá de la capacidad de interceptación de este misil defensivo Estadounidense.

Para eso se desarrolló el interceptor GBI aunque ha salido muy malo.

Ahora se pretende llegar al apogeo de los IRBMs pero, de nuevo, este se desarrolla muy por encima del techo máximo de los SM-3. Incluso buena parte de su trayectoria se desarrolla más allá de la capacidad de interceptación del SM-3.

Donde el SM-3 puede ser útil e incluso eficáz es a la hora de enfrentar SRBMs y MRBMs ya que sus apogeos son más bajos y esto puede ser suficiente para que un interceptor como el comentado pueda intentar interceptalos.

Se está vendiendo la instalación del SM-3 en Rota como algo desestabilizador pero en realidad en el balance estratégico no son una erosión significativa.

Hasta luego

JOSE dijo...

Evidentemente, tienes toda razón, además también hay que tener en cuenta la masa de uno y de otro, ya que se voy en la guerra del Giolfo que lo único que podían hacer los patriot contra los Scud, era desviarlos de su trayectoria. Los S-300, 400 y futuros 500 de ejercito ruso, mantienen sus intercepciones sobre las ojivas, más que sobre los misiles.

Voy a publicar un video para que quede claro.

Sal2 y gracias