MOSCU / Reuters - Vladimir Putin ordenó el miércoles a los líderes militares de Rusia que realicen mejoras urgentes a las Fuerzas Armadas durante su nuevo mandato presidencial, y señaló que el país debe frustrar los intentos de Occidente por inclinar el equilibrio estratégico de poder.
Las declaraciones de Putin, a filas de oficiales uniformados y funcionarios de Defensa, reflejaron la cada vez mayor dureza desde que regresó al Kremlin en mayo pasado para un período de seis años de Gobierno.
Putin también ha mostrado cada vez más disposición a mencionar amenazas externas y usar una retórica anti-occidental para ganar respaldo.
"Se están realizando intentos para inclinar el equilibrio estratégico", dijo Putin, quien como presidente es además comandante en jefe de las Fuerzas Armadas, ante una audiencia en la academia general militar en las afueras de Moscú.
"La dinámica geopolítica insta a una respuesta rápida y evaluada (...) Las Fuerzas Armadas de Rusia deben avanzar a un nuevo nivel de capacidad en los próximos tres a cinco años", dijo Putin, quien no descartó buscar un nuevo mandato en el 2018.
El ex espía de la KGB indicó que los movimientos que amenazaban la posición geopolítica rusa incluían la expansión hacia el este de la OTAN, ex enemigo de Rusia en la Guerra Fría, y el despliegue de Estados Unidos de un campo anti-misiles en Europa.
El mandatario ruso señaló que los adiestramientos deben modernizarse para mantener a los soldados actualizados.
"El entrenamiento de combate no debe relajarse, para que los soldados sepan sobre ejercicios de emergencia con seis meses de antelación, sino que tienen que ser lo más similares posible a las condiciones reales del combate moderno y la guerra", manifestó Putin.
Tras una década de recortes en gastos militares luego del colapso de la Unión Soviética en 1991, Putin ha estado impulsando planes para gastar 23 billones de rublos (750.000 millones de dólares) al 2020 para actualizar el antiguo armamento ruso.
El Ejército ruso, con aproximadamente 1 millón de hombres en servicio, aún depende ampliamente de la infraestructura y armamento de la era soviética. Sigue además dependiendo de la conscripción, aunque el Kremlin promete convertir la actividad militar en completamente profesional.
Activistas de derechos humanos señalan que el brutal hostigamiento ha sido una característica desde el colapso de la Unión Soviética, y que el sector militar está plagado de corrupción.
Las relaciones de Rusia con Estados Unidos se han deteriorado debido a los planes de defensa con misiles de Washington y a las preocupaciones estadounidenses sobre la libertad política en Moscú, además de las disputas comerciales.
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