Una fragata de la Armada australiana, HMAS Sydney, se unirá a la séptima flota de EE.UU. en Japón, en un momento de crecientes tensiones en la península coreana y en el Mar del Sur de China, así ha informado este viernes el diario The Australian.
Según el diario australiano, el buque de guerra estará “integrado” por un grupo de portaviones estadounidenses que operan en Yokosuka, aunque la noticia no ha sido confirmada aún por el departamento de Defensa.
HMAS Sydney es una fragata de misiles guiados, de clase Adelaide, que fue botado en 1980. El buque fue enviado al Golfo Pérsico en cinco ocasiones, en apoyo a las operaciones de EE.UU. durante la Guerra del Golfo, la de Afganistán y de Irak.
Según el informe, esta misión está planeada desde hace tiempo para aumentar la experiencia de la Armada de Australia en la proporción de defensa aérea de la flota, para la llegada de dos buques de desembarco masivo de la Marina.
“Australia ha dejado claro que está codo a codo con Corea del Sur, y también con Japón”, el informe cita al ministro australiano de Defensa, Stephen Smith.
La península coreana está inmersa en un ciclo de retórica bélica, tras el uso de los bombarderos estratégicos B-52 y submarinos nucleares en las maniobras militares conjuntas entre EE.UU. y Corea del Sur, hecho que fue calificado por Pyongyang como una “provocación imperdonable”.
El 30 de marzo pasado, Corea del Norte declaró que se encontraba en un “estado de guerra” con Corea del Sur, y advirtió que cualquier provocación de Seúl y Washington desencadenaría una guerra nuclear a gran escala.
Por este motivo, el Pentágono tiene previsto desplegar el 60 por ciento de su fuerza naval en aguas de Asia Oriental y en las fronteras de China, aun cuando las autoridades del gigante asiático, en retiradas ocasiones, han criticado las políticas de EE.UU. respecto al continente.
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