Con ocasión de la celebración de la Cumbre Unión Europea, América Latina y el Caribe en la capital de España, se han reunido en Madrid un gran número de aviones VIP, la mayor parte de ellos militares.
Desde el pasado fin de semana, numerosos aparatos de transporte han ido trayendo a los miembros de las diferentes delegaciones asistentes a la cumbre. En total han llegado más de 80 delegaciones, 33 de éstas encabezadas por jefes de Estado o Gobierno, lo que ha propiciado un intenso tráfico aéreo con destino al aeropuerto de Barajas y a la cercana Base Aérea del Ejército del Aire de Torrejón de Ardoz.
Las delegaciones han llegado en aviones privados, comerciales y en los aparatos presidenciales de las diferentes fuerzas aéreas. Así, desde los aviones militares grandes, como los Boeing 767 de la Fuerza Aérea de Chile y el Boeing 757 de la Argentina, a los relativamente pequeños EMB-135 de la de Grecia y la de Bélgica, pasando por transportes medios como el Boeing-737 de Colombia, fueron tomando tierra en la Base de Torrejón de Ardoz.
Destacó la presencia de dos aparatos de la Força Aérea Brasileira, el recientemente entregado, VC-2 (Embraer ERJ-190AR) matriculado 2591, que traía parte de la delegación desde Brasil. A este último se sumó el avión presidencial, un Airbus A-319-133XJ, denominado VC-1A en la Força, en el que llegó Lula da Silva desde Irán, donde el mandatario carioca realizó una visita previa de Estado.
En suma, una gran concentración de aparatos militares de transporte VIP que se tardará bastantes años en volver a ver sobre los cielos madrileños (Julio Maíz Sanz).
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