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jueves, 10 de junio de 2010

Irán sugiere a Rusia no repetir los errores que destruyeron a la URSS

Moscú, 9 de junio, RIA Novosti.
Irán amenazó con revisar sus relaciones con Rusia y la llamó a evitar los errores de la extinta Unión Soviética, escribe Nezavisimaya Gazeta. Teherán lanzó esta advertencia de cara a una votación prevista para hoy en el Consejo de Seguridad de la ONU, y en la que Rusia, según las previsiones, apoyará el recrudecimiento de las sanciones internacionales contra el régimen iraní. El presidente de Irán, Mahmud Ahmadineyad, declaró ayer en Estambul que Rusia "debería manifestar prudencia y no estar hombro a hombro con los enemigos del pueblo iraní". Un alto parlamentario iraní, Kazem Yalali, mencionó anteriormente la posibilidad de "revisar el nivel de las relaciones" con Moscú en caso de que siga la estela de un grupo "extremista y radical" encabezado por EEUU. Otro diputado influyente, Esmail Kosari, aconsejó al mandatario ruso, Dmitri Medvédev, estudiar la historia reciente para no reincidir en los errores que provocaron la desintegración de la URSS. Estas reacciones emocionales siguieron al anuncio, hecho por Medvédev durante una visita a Alemania, de que en el Consejo de Seguridad (CS) de la ONU hay un acuerdo sobre las nuevas sanciones contra Irán. El primer ministro de Rusia, Vladímir Putin, confirmó ayer que la resolución correspondiente está "prácticamente acordada". El ministro ruso de Asuntos Exteriores, Serguei Lavrov, señaló antes que el borrador del documento no prevé "sanciones paralizantes", por exigencia de Pekín y Moscú. Rusia confía en que la resolución empujará a Irán a disipar las dudas acerca de su programa nuclear. Putin, deseoso tal vez de moderar la postura de Teherán, aseguró ayer que Rusia cumplirá la promesa de lanzar en agosto próximo una central nuclear que fue construida con su ayuda en la ciudad iraní de Bushehr. Nina Mamédova, colaboradora del Instituto ruso de Estudios Orientales, duda de que Rusia se vea fuertemente perjudicada por el hipotético enfriamiento de las relaciones con Irán, al que corresponde apenas un 0,4% de su comercio exterior. Claro que los iraníes pueden reorientarse a la compra de armas a China, y a la importación de metales desde Turquía, pero es probable que en ambos casos pierdan en calidad.

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