Fuente: dpa | 17/07/2011
Kabul, 17 jul (dpa) - Las fuerzas de la OTAN en Afganistán (ISAF) comenzaron a traspasar hoy a las fuerzas afganas el control de la seguridad del país.
El Ejército y la policía afganos se hicieron hoy oficialmente cargo de la seguridad en la provincia de Bamian, en el centro del país. En la zona, relativamente tranquila, estaba estacionado hasta ahora un reducido contingente de soldados procedentes de Estados Unidos, Singapur y Nueva Zelanda.
"Hoy comienza la transición", dijo el portavoz del gobierno provincial Abdul Rahman Ahmadi, que aseguró que el gobierno y la población de Bamian están en condiciones de garantizar la seguridad.
En el acto de traspaso tomaron parte los ministros de Interior y Defensa de Afganistán, el comandante general de la ISAF, David Petraeus, así como los embajadores de Japón y Nueva Zelanda. La ceremonia no fue anunciada previamente por motivos de seguridad y sólo se invitó a unos pocos medios de comunicación.
El titular de Interior, Besmullah Mohammadi, aseguró que tras la retirada de las fuerzas internacionales se aumentará el número de efectivos nacionales destacados en Bamian. En la actualidad, en la zona hay unos 1.000 policías afganos y una pequeña unidad del Ejército.
En los próximos meses la ISAF entregará a los afganos el control de un total de siete zonas, entre ellas dos provincias y la mayor parte de la provincia de Kabul.
La OTAN prevé concluir con la misión en el país centroasiático en 2014. Para entonces tiene que haber traspasado por completo las competencias de seguridad a las autoridades afganas y habrá retirado a la mayor parte de los 140.000 efectivos destacados actualmente en el país.
Entre los aliados surgieron sin embargo algunas dudas sobre la capacidad de las fuerzas de seguridad afganas para hacerse cargo de la situación.
La comisión parlamentaria de Defensa de Reino Unido duda de la actual capacidad del Ejército afgano y apunta que la retida de los soldados británicos deberá hacerse de acuerdo con la situación real. El minsitro de Defensa británico, Liam Fox, considera sin embargo que los objetivos norteamericanos son alcanzables.
También algunos generales estadounidenses son escépticos ante la fecha de retirada de las tropas extranjeras.
La propia población de Bamian temen que el país vuelva a caer en enfrentamientos internos, como ocurrió a comienzos de los años 90, cuando las tropas extranjeras salieron del país.
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