Moscú condena y exige la investigación del ataque aéreo de las fuerzas de OTAN en Afganistán que dejo al menos once niños y una mujer muertos en la provincia de Kunar el pasado siete de abril.
“Es preciso castigar a los culpables de la muerte de los civiles y tomar medidas para prevenir que algo similar se repita en el futuro”, escribió el representante para los Derechos Humanos del Ministerio de Exteriores ruso, Konstantín Dolgov, en su cuenta de Twitter. “Es responsabilidad de la OTAN”.
La Fuerza Internacional de Asistencia para la Seguridad en Afganistán (ISAF, por sus siglas en inglés) anunció en un comunicado que la operación del siete de abril se llevó a cabo “por iniciativa de las fuerzas de la coalición” y tenía como objetivo “atacar a los insurgentes” en una zona alejada de las poblaciones civiles.
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